La otoplastia es un procedimiento quirúrgico que se realiza para corregir las orejas prominentes o deformidades en la forma de las orejas. También conocida como cirugía de orejas, la otoplastia puede mejorar la apariencia de las orejas y equilibrar su tamaño y forma en relación con el rostro.
Durante una otoplastia, el cirujano plástico realiza incisiones detrás de las orejas o en los pliegues naturales de las orejas para minimizar las cicatrices visibles. A través de estas incisiones, se remodela el cartílago de las orejas para reposicionarlas más cerca de la cabeza y lograr una apariencia más natural.
Algunos cambios que se pueden lograr con una otoplastia incluyen:
Corrección de orejas prominentes: Si las orejas sobresalen en exceso, se pueden reposicionar más cerca de la cabeza para lograr un perfil más equilibrado.
Reducción del tamaño de las orejas: Si las orejas son demasiado grandes, se pueden reducir mediante la eliminación de cartílago y tejido.
Corrección de la forma de las orejas: Si hay deformidades en la forma de las orejas, como pliegues excesivos o ausentes, se pueden corregir y remodelar para lograr una apariencia más estética.
Después de una otoplastia, se pueden experimentar hinchazón, sensibilidad y malestar temporal en las orejas. Se proporcionarán instrucciones postoperatorias para cuidar adecuadamente de las orejas y facilitar una recuperación óptima.
Es importante consultar con un cirujano plástico especializado en otoplastia para evaluar si este procedimiento es adecuado para usted. El cirujano podrá examinar su estructura y forma de las orejas, discutir sus expectativas y objetivos, y proporcionarle una evaluación personalizada y recomendaciones específicas para obtener los mejores resultados posibles.